17 de julio de 2009
La patente del nuevo material pertenece a Margarita Calafell, investigadora del Departamento de Ingeniería Química en la Escuela técnica Superior de Ingenierías industrial y Aeronáutica de Terrassa (ETSEIAT) de la UPC, que ha fabricado el material a partir del tratamiento biotecnológico de los residuos del papel.
El proceso se basa en aprovechar el proceso de reciclaje del papel y fabricar un nuevo material con propiedades únicas altamente resistente, versátil, modelable, ignífugo, impermeable, y poroso respetando el medio ambiente.
Estas características podrían hacer que este material sustituyera, en muchos usos, a otros materiales más contaminantes, como el plástico, los derivados de la madera y los cauchos. Además, gracias a sus propiedades de resistencia, aislantes, impermeables y de baja densidad se podrá utilizar en numerosos sectores productivos industriales. Por ejemplo, podrá sustituir al Pladur y muchos materiales que se utilizan en el sector de la construcción.
La novedad del proyecto reside en la gran versatilidad de la metodología utilizada para conseguir el material. Calafell, responsable del Laboratorio de Catálisis Enzimática del grupo de investigación ENGIBIO de la UPC, asegura que la nueva técnica se puede conseguir modificando las propiedades de todo tipo de residuos que provengan de materias celulósicas (papel), poliméricas (plásticos) e incluso del caucho de los neumáticos.
Este proyecto ha sido seleccionado entre los 170 proyectos presentados al 9.º Concurso de Ideas de Negocio que organiza la agencia ACC1Ó de la Generalitat de Catalunya y también ha sido el ganador, entre 37 proyectos, del concurso BioEmprenedor XXI, promovido por la Fundación Genoma España .■